viernes, 5 de febrero de 2021

"Conspiración de silencio" de John Sturges, 1955.

Se encuentra en mi top de 20 películas, aunque la verdad suelo huir de este tipo de top. Y es que considero, que aparte de la validez artística de una obra cinematográfica, tiene que ver mucho el momento en el que uno se dispone a visionarla. Igual te apetece una de Indiana Jones, como en otro momento, ver algo de Cecil BDemille. Para gustos los colores y los distintos momentos de la vida de uno. No obstante siempre va a existir una personal inclinación. Y esta película es una de mis preferidas. El director de “Fort Bravo" (1953), “Duelo de titanes" (1957), “La gran evasión" (1963), “Estación Polar Zebra" (1968),… reuniría un reparto de infarto para ofrecernos una obra mítica, debido a las interpretaciones y al contenido de la obra, sin artificios y directa a la conciencia. Me refiero a la película “Conspiración de silencio" de John Sturges, 1955.


Recuerdo de pequeño, acudir algún que otro domingo a mi futuro colegio de estudios de bachillerato y universitarios, a ver unas obras teatrales que preparaban con esmerada dedicación un grupo de padres, unidos bajo las órdenes de Sor María José. Recordaré siempre con cariño aquellas obras e interpretaciones. Sin ser profesionales, les aseguro el alto nivel interpretativo y de escena que había en las representaciones. Esa admiración y sentimiento de disfrute en mi infancia se vio despertado por el teatro y películas como “La soga" (Alfred Hitchcok, 1948), “La huella" (Joseph L. Mankiewicz, 1972),… y “Conspiración de silencio". Películas cuya columna vertebral era el desarrollo interpretativo de sus personajes. Recuerdo haber descubierto esta película en la televisión, y desde entonces, es raro el año que no la haya vuelto a ver, sobre todo cuando la tienes en un lugar destacado de tu videoteca.

Carteles de dos películas

La película de Sturges es un duelo de titanes de la interpretación, en verdadero estado de gracia. Cada momento del film es una secuencia de lucimiento para el intérprete que esté en pantalla. La trama comienza con la llegada de un forastero a un pueblito. Nadie conoce al forastero y sus preguntas comienzan a inquietar a la pequeña población. Se puede decir que la película es un verdadero estudio social, entorno a una serie de sucesos acaecidos en la persona de un tal Komako. Aquel forastero misterioso pondrá de los nervios a varios lugareños y descubrirá algo un tanto molesto, para los habitantes del inhóspito y desértico pueblo de Black Rock.

Fotograma de la película 

John Sturges sabedor de tener entre sus manos una futura obra excelente, por la temática moral de trasfondo y por basarse en sucesos relativamente cercanos en el tiempo, como fueron los desencadenantes para la incursión de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial (tras el ataque a Pearl Harbor), sabía de las miras que debía de tener en el reparto. Metro Goldwyn Mayer ponía en marcha una producción con estrellas y un relato de gran calado social. Esto es algo que trajo la nueva política de producción de Dore Schary (jefe de producción y después cabeza visible de Metro Goldwyn Mayer), películas con mensaje.

John Sturges (britannica.com) y Dore Schary (imdb.com)

Spencer Tracy, Lee Marvin, Robert Ryan, Walter Brennan,… dejaron impresas sus excelentes interpretaciones. La película comienza con la llegada de John J. Macreedy (Spencer Tracy) a la estación de tren de un pueblito casi perdido en el oeste del país. A partir de su llegada, John va encontrándose cara a cara con determinados vecinos, orquestados por el cabecilla de todos ellos, Reno (Robert Ryan). Todo el reparto tiene su momento, su secuencia. Spencer Tracy hace gala de su tercer apellido, “naturalidad”. La historia nos puede dar la sensación de ser una especie de western encubierto. En este caso, un thriller donde la violencia no se encuentra en las armas, sino en los diálogos.

Fotograma de la película 

Fotograma de la película 

La ubicación de la trama sirve para resaltar ciertos momentos e incluso transmitir cierta ansiedad. Sturges, se mueve como pez en el agua en ubicaciones del oeste, pero llega a un “master” al conseguir un thriller agobiante, con planos abiertos y utilizando el Cinemascope. El juego fotográfico de las ubicaciones en el desarrollo de las secuencias, tiene lecturas artísticas y psicológicas en el tratamiento de la imagen, como: la estación de tren, la encrucijada de caminos, la gasolinera, el hotel,... El guion perfectamente ajustado es una maravilla de Millar Kaufman. Su pasado en el servicio militar del Pacífico, le sirvió para trabajos como “Hombres de infantería" (Richard Brooks, 1953) y el de la película que comentamos. No es fácil tratar temas relacionados con el racismo, e ir metiendo al espectador en una reflexión y exposición de los hechos, sobre todo en 1955 y en una sociedad tan dividida por entonces, como la de los Estados Unidos. Todo ello, sin caer a priori en una moralina infantil, sin entrar en profundidad en claras exposiciones del tema. El equipo artístico (guionista, director e intérpretes) consiguen a mi juicio, una de las mejores obras fílmicas, carne de cañón para interesantes debates sobre los comportamientos xenófobos. Y no solamente ello, sino reflejar con gran veracidad, los distintos perfiles de comportamiento, que a pesar del tiempo transcurrido y supuestos avances sociales, seguimos encontrando en nuestro presente. Eso solo lo consiguen las obras maestras.

Millard Kaufman (groveatlantic.com)

André Previn (“Gigi” de Vicente Minelli, 1958; “My Fair Lady" de George Cukor, 1964;…) compuso la banda sonora. Podría haberse inclinado por sonidos más del estilo del western, debido a la ubicación de la historia, y más o menos el enfoque del director, pero supo introducir momentos donde la música clásica se fusiona con un sonido muy cercano al Jazz, de quien también era compositor.

André Previn (abc.es)

“Conspiración de silencio", rompió moldes. Duración de 78 minutos, un elenco de estrellas, una historia con mensaje, Cinemascope y en un pueblito perdido de la mano de Dios. Una obra que recibió incluso un reconocimiento por parte del gobierno japonés.

Cartel de la película 


Tráiler de la película: https://youtu.be/IP57NcLzJQE


Ambigú Cinema - "Conspiración de silencio" de John Sturges, 1955.





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