Si tengo especial cariño a una película de cine de verano, sin duda es esta. Corrían la segunda mitad de los 80, cuando una noche de verano acudimos a nuestra cita nocturna al cine de verano “Pau" (Campello – Alicante). Esa noche proyectaban “FX – EFECTOS MORTALES" de Robert Mandel (1986). Habíamos visto con anterioridad el tráiler y tenía los ingredientes perfectos para mi gusto en aquel momento: thriller, efectos especiales, acción,… Aquella película fue una gran sorpresa para la audiencia en general y para Orion Pictures. En principio el film estuvo ideado para la televisión, pero alguien vio idóneo el producto para su comercialización en cine. No se equivocó. La película protagonizada por Bryan Brown, prolífico en los 80, iba de pelotazo en pelotazo. El gran público lo volvería a encontrar años más tarde en “Coctails" (Roger Donaldson -1988), compartiendo rodaje con Tom Cruise. Otra mítica. Pero centrándonos en la actual. Rollie Tyler (personaje interpretado por Bryan) es un técnico de efectos especiales (Fx) del cine, contratado por el departamento de justicia para simular el crimen de un gánster. No todo sale como lo previsto, y el bueno de Tyler se ve inmerso en un thriller, huyendo para salvar su vida, intentando demostrar su inocencia en una trama bastante oscura. Su única arma será su imaginación y capacidad para los efectos especiales. Una película muy entretenida, perfectamente tratada por su director, haciendo que jamás la película pierda su esencia de thriller. La película fue una de las más alquiladas en los videoclubs (dato histórico). En el año 1991 se estrenaría su secuela “Fx 2: ilusiones mortales" (Richard Franklin – 1991), no llegando al éxito de la primera.
Sigamos a Tyler, a ver cómo se las ingenia para escapar con vida sirviéndose de su magia en una mezcla entre el Dr. Richard Kimble (“El fugitivo" – serie años 1963 a 1967/ película 1993, dirigida por Andrew Davis) y McGyver. Casi nada.